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Desde que Raul Pérez, con 18 años, se hizo cargo de la bodega familiar de Castro Ventosa, su gran objetivo es crear grandes vinos con las cepas viejas del Valtuille que es una localidad situada en Villafranca del Bierzo, comunidad autónoma de Castilla y León en España. 

Y este vino no es la excepción. Las uvas provienen de cepas entre 60 y 80 años en la zona de Meaño, al lado del mar. Para su elaboración se utilizan barricas de roble de 750 ml, pero lo más excepcional, es su crianza en botella pues parte de las botellas se colocan en jaulas metálicas a 19 metros bajo una cueva en la ría de Arousa, justo cuando el río el el mar se encuentran, y por esto lo han denominado “El Albariño que se crea en el mar”. Solo se elaboran 1500 botellas al año y no se elabora todos los años.

Es un vino blanco muy complejo aromáticamente, de carácter mineral con fruta blanca y cítricos además de flores silvestres y hierbas, con un fondo salino aportado por la cercanía al mar, y en boca resulta un vino amplio y muy fresco, sobresalen las notas frutales y cítricas nuevamente.