Ardbeg Diez Años *750 ml
Ardbeg 10 Años es un whisky escocés de malta única que encarna la esencia robusta y distintiva de la destilería situada en la isla de Islay. Con un color dorado palido, su aroma es una explosión de turba ahumada, característica definitoria de Ardbeg, complementada por notas marinas de sal marina y algas. Este perfil olfativo se enriquece con toques frescos de limón y un sutil dulzor de vainilla. En boca, ofrece una experiencia intensamente ahumada y especiada, con notas predominantes de turba, humo de chimenea y un equilibrio delicado de vainilla y caramelo que suavizan la intensidad
Precio: $510.000
Aspecto: color dorado palido brillante
Aroma: Una ráfaga de fruta ahumada intensa se escapa a la atmósfera de turba infusionada con limón y lima picantes, envuelta en chocolate amargo ceroso. Mentol intenso y pimienta negra atraviesan el dulce humo, seguidos de cuerdas alquitranadas y grafito.
Boca: Una explosión de turba crepitante desencadena millones de explosiones de sabor, la turba efervescente con jugo picante de limón y lima, estallidos de pimienta negra con toffee especiado con canela. Luego viene una ola de salmuera, plátanos maduros y grosellas. El humo brota gradualmente en el paladar, trayendo un bocado de capuchino cremoso y tibio y malvaviscos tostados
La destilería Ardbeg, situada en la pintoresca isla de Islay en Escocia, tiene una historia rica y llena de momentos significativos que han definido su legado en el mundo del whisky escocés. Fundada en 1815 por John McDougall, Ardbeg rápidamente se estableció como un pilar en la comunidad de destilerías de Islay
A lo largo de los años, Ardbeg ha enfrentado desafíos significativos, incluyendo cierres temporales y cambios de propiedad, pero siempre ha perseverado gracias a su dedicación a la calidad y a la pasión de sus destiladores. Durante gran parte del siglo XX, la destilería luchó por mantenerse a flote en un mercado cambiante y desafiante para el whisky escocés,
Uno de los momentos más importantes en la historia reciente de Ardbeg fue su adquisición por parte de Glenmorangie Plc en 1997, un cambio que revitalizó la destilería y la llevó a un renacimiento global. Bajo el liderazgo de Glenmorangie,